Las autoridades de Costa Rica comenzaron hoy a deportar hacia Nicaragua a más de un centenar de cubanos en condición irregular, mientras en la frontera con Panamá hay cerca de mil esperando ingresar, informaron a Acan-Efe fuentes gubernamentales.
Los caribeños que están siendo deportados ingresaron a Costa Rica de manera ilegal en las últimas semanas y se encontraban detenidos en un centro de la Dirección de Migración en San José.
La directora de Migración de Costa Rica, Kathya Rodríguez, dijo a periodistas que «el gobierno nicarag ense aceptó a los cubanos que tengan los papeles en orden».
Aparte de ellos, en la actualidad hay casi mil cubanos en Paso Canoas, frontera con Panamá, aunque las autoridades han dicho que es difícil precisar el número exacto.
Estos migrantes, que han ido llegando a Paso Canoas paulatinamente durante las últimas semanas, intentan ingresar a Costa Rica para seguir su travesía a EE.UU., pero la directora de Migración enfatizó en que quienes ingresaron ilegalmente «no podrán seguir en Costa Rica y serán devueltos a Panamá».
Los cubanos, que requieren de visa para entrar a Costa Rica, llegaron procedentes de Panamá, se hospedan en pequeños hoteles y pretenden que se les otorgue un salvoconducto para transitar por suelo costarricense y cruzar a Nicaragua.
La directora de Migración dijo que «desconoce» los trámites migratorios que les exige Panamá a estas personas.
Este jueves los migrantes se manifestaron en Paso Canoas pidiendo soluciones a su situación, que en algunos casos es extrema, ya que llevan varias semanas en la frontera.
Estas personas afirman que llegaron en avión a Ecuador y, desde allí tomaron autobuses a Colombia y luego barcos a Panamá, desde donde se trasladaron por tierra a la frontera con Costa Rica.
Esta semana las autoridades de Costa Rica desmantelaron un banda dedicada al tráfico de extranjeros, principalmente cubanos en su travesía hacia Estados Unidos.